La seguridad de las infraestructuras críticas se refiere a los esfuerzos, estrategias y prácticas puestos en marcha para proteger y defender los activos, sistemas y redes de infraestructuras críticas esenciales para la seguridad, la economía, la salud pública y la seguridad de una nación. Estas infraestructuras críticas pueden incluir activos físicos, como centrales eléctricas, sistemas de transporte, sistemas de suministro de agua, y activos digitales, como redes de comunicación y sistemas de tecnología de la información.
El principal objetivo de la seguridad de las infraestructuras críticas es garantizar la resistencia y fiabilidad de estos sistemas cruciales mediante la prevención, detección, mitigación y recuperación ante amenazas e incidentes que puedan interrumpirlos o dañarlos. Las amenazas pueden adoptar diversas formas, como ciberataques, terrorismo, catástrofes naturales o errores humanos.
Para garantizar una seguridad eficaz de las infraestructuras críticas se requiere un enfoque global, que puede implicar
- Evaluación de riesgos: Identificación de posibles amenazas, vulnerabilidades y consecuencias para priorizar recursos y acciones.
- Seguridad física: Aplicación de medidas para proteger los activos de infraestructura contra el acceso no autorizado, el robo, el daño o el sabotaje.
- Ciberseguridad: Defender los sistemas digitales y las redes frente a las ciberamenazas, como la piratería informática, los programas maliciosos y los ataques de denegación de servicio.
- Intercambio de información: Compartir información sobre amenazas, vulnerabilidades y mejores prácticas con las partes interesadas fomenta la colaboración y mejora el conocimiento de la situación.
- Planificación de la respuesta a incidentes: Desarrollar y mantener planes para responder y recuperarse de incidentes que afecten a infraestructuras críticas.
- Mejora continua: Evaluar y actualizar periódicamente las medidas, tecnologías y estrategias de seguridad para seguir el ritmo de la evolución de las amenazas y las mejores prácticas del sector.
La seguridad de las infraestructuras críticas suele implicar la cooperación entre organismos gubernamentales, organizaciones del sector privado y socios internacionales para garantizar un enfoque coordinado y multicapa de la protección.